Yo creo que les puede aportar bastante: más tiempo libre, comer mejor y ahorrar algo de energía. El ahorro de energía ya lo hemos comentado otras veces ya que cocinar doble cantidad supone un gasto menor que cocinar dos veces, especialmente si se hace en olla exprés.
En su largo e-mail Alicia dice que le impone la olla exprés, mas bien que tiene cierto miedo, a ese tipo de olla. Yo se la recomendaría sin lugar a du.
das; ahora bien creo que el miedo le disminuiría si se rascase un poco el bolsillo y comprase una olla como las de Kuhn Rikon Duromatic o la Perfect de WMF; yo me inclinaría por la primera; ambas tienen doble válvula de seguridad pero los recambios de la suiza son algo mas baratos. Con su presión de trabajo ya sea a 0,4 bars o a 0,8 bar , prácticamente no te enteras que tienes la olla en marcha, y si se oye es que al presión esta ligeramente aumentada y se baja la temperatura con la que se cocina [Ver opiniones en Ciao].
Ganarían tiempo libre y comerían mejor si dedican parte del sábado o del domingo a cocinar ya que de esa forma no irían tan apremiados como ahora cocinando casi todas las noches y como mucho tendrían que cocinar una noche en la semana. La organización sería a base de guisos de pescado o carne para los días de Lunes a Viernes para los segundos platos. Las pastas aguantan en el vacío y los guisos los podrían almacenar con confianza hasta 8-10 días. Potajes de legumbres aguantan bien el vacío. Si quieren disfrutar de pescado lo deberían dejar para el sábado y el domingo ya que como decía mi madre: "el pescado comerlo el mismo día y como mucho al siguiente". Con el pescado la trazabilidad está prácticamente ausente en las pescaderarías, salvo el marisco en que tiene que tener la etiqueta de la fecha en que ha salido de al depuradora; por eso a pesar del vacío sigo los consejos de mi madre.
Como hemos repetido, el vacío es de gran ayuda para mantener las cualidades de los alimentos en el congelador y prolongar su almacenado como he indicado en las tablas de Food Saver de un reciente post. Puedo afirmar que el pescado de cultivo (doradas, lubinas) mantiene el sabor del primer día meses; esa vivencia no la tengo con el pescado de corte. Los filetes de las piezas de la macroteinda cárnica a la que va mi amigo Manolo Bis se mantienen con una cualidad impecable al vacío en el congelador.
No hay comentarios:
Publicar un comentario